It was around 1988 when I met Team Expansion people. By that time I have heard something about Jesus Christ, but never felt the joy of being part of anything bigger than attending a catholic church on Fridays or Sundays (obliged) because my primary school was done with catholic priests...
In that occasion I saw many teens and the evangelist Douglas Hardman (one I like to thank for his commitment in preaching). I met some others who shared their food and friendship in a fast-food restaurant (?) and offered me a kind talk, their love and FOOD! (It was odd for me those days within my Venezuelan culture). Doug Hardman encouraged me to visit the church at Bello Monte (Caracas). I met my brother Jim Dye and his family. I developed a relationship with Jesus Christ by getting in CLOSE contact with a NEW WAY of Christians, those who were interested in PEOPLE´S NEEDS, sincere and not pushy with the message of the Lord.
So after being baptized, I started to work for the missioners there. David Lynn hired me to work for cleaning that house and I got extra money by translating their things into Spanish and helping conveying their ideas into my culture and church brochures.
I met Brent Lynn and Tom Powell and I started to work on La Dolorita church. That relationship gave me books from Tom´s library and 15 years later I started to preach the word of God in Las Tejerías, Edo Aragua, on my own and not seeking to make a church, but to plant God´s word in the mind of hears.
I´m thankful for those who made possible my conversion and others in Venezuela. I have moved to Colombia to scape Venezuelan political affairs (I hate that government of Chávez) and I plan to stay -here in Colombia- as long as God allows me to travel to Canada or Australia, just in case He helps me get some money to get a better housing since I left all my stuff, my sons and daughter, family, my piece of land and house, to avoid the sins and things I hate from that country I don´t like any longer.
Thanks to Team Expansion commission, supporters and money collaborators. To Douglas Hardman, Tom Powell (a friend I lost sight of), Eric Barry... and those who were engaged with His holy task over there.
My love and best wishes!
A.T.
Tuesday, March 16, 2010
Wednesday, March 10, 2010
Carta de una cristiana a muchos en Vzla.
A continuación transcribo lo que me fue entregado:
"La Esperanza, 10/12/2009 3:30:19.
La presente está dirigida a Uds. –hermanos y hermanas- a quienes el Señor Jesucristo ha tenido a bien encomendarles parte de Sus rebaños.
Nuestro Padre celestial, quién está en lo más alto, nos dio el servicio ejemplar y vicario, para que todos los que creemos en Él lo siguiéramos e imitásemos. Nuestro Padre no envió a varios de sus hijos “únicos” a morir en distintas y variadas cruces, sino única y exclusivamente al Señor Jesucristo; no obstante, por décadas cada denominación inventa el acomodo de su religión, como si no nos debiésemos a un mismo Señor y un mismo Salvador, cuya sangre menospreciamos al subestimar a otros, tan semejantes en el humano pecado y esta necesidad de redención que tenemos todos, sin distingo de raza, posición social o cultural.
Católicos, Evangélicos, “Testigos” –judíos y no judíos- hemos creado abismos denominacionales, y la palabra que se predica en la reunión de los unos, es distinta a la que Dios nos enseña para seguirlo y honrarle, de la cual Uds tienen un mayor y amplio conocimiento.
Este preámbulo es para decirles que es tiempo de unirse, como hermanos e hijos adoptivos del mismo Padre Celestial. No es un movimiento eucuménico, sino una necesidad que se hace cuando Cristo mismo nos exhortó a amarnos ¡mucho más que una simple palabra!.
En esta país, el enemigo ha colocado su trono. No me bastan estas líneas para explicar lo que Uds mismos ya saben y no es un secreto. Un siervo suyo se dedica a despotricar de la genocida (asesina) Israel, se involucra con naciones remotas que desean destruirla y esa clase de discordia es parte de las profecías apocalípticas y, la mejor prueba es un país dividido, familias fragmentadas por constantes cruces de opiniones, mismas que irrespetan hijos y parejas, empleando peyorativos de distinta naturaleza y –peor aún- discriminaciones que enlutecen hogares por simple y radical opinión política o avaricia económica..
Hombres y mujeres irrespetando sus parejas “escuálidas”. El irrespeto y la desidia ha colocado armas de fuego en personas indebidas, cuyas manos matan unos y otros, aprovechando la maldad sacar sus galas de envidia, egoísmo, en esta falsa sensación de seguridad y “PAZ” que la boca proclama, y las muertes diariamente contradicen.
El Padre Celestial quiere UNA ORACIÓN EN CADENA. Él desea que afinemos una misma Palabra en los oídos de Sus rebaños. Que el tal día de oración por Venezuela, no se realice dentro de un templo o lugar encerrado alguno, sino en sitio público y visible.
La calle, para ese día que Uds acuerden y organicen, ha de ser el sitio de acceso para que todo el que pase escuche y se aperciba: “El que tenga oídos que escuche” (Mateo 10:26-31).
Ese día, el que han de disponer en consenso –mismo día y misma hora- será para que se consagren en una vigilia, una oración en cadena, donde sacerdotes, pastores y todo el que tenga un llamado a liderizar un rebaño, investigue y ore a Dios para cada cita o estudio que ha de leer o tratar en esa reunión pública. Esa Palabra ha de exhortar a la unión e invocar al respeto familiar. Somos una diversidad, pero un solo cuerpo UNIDOS en Jesucristo. Se ha de enfatizar la supremacía de Dios por sobre todo principado y humano y, al mismo tiempo, aclarar que fuimos comprados por el incalculable sacrificio de la sangre de Cristo, la cual fue derramada para salvación de los que somos adoptados como hijos, la cual nos hace libres para servirle y hermanos para honrarle.
Siendo este el núcleo del mensaje, les exhorto a que lo comuniquen al rebaño que Dios les ha prestado. Háganles llegar el mensaje y que compartan esta visión, donde hemos de hacer a un lado la religión y denominación: El Señor les ha dado la sabiduría y muy bien sabe que podrán unirse en este propósito, mismo que exalta Su nombre y procura clamar por la nación que muchas cosas ha perdido.
Dios les permita participar y ejecutar este objetivo, y que este mensaje alcance a todo pastor, sacerdote o a quien desee figurar como líder, en un país que necesita una cadena de oración, un fraternal abrazo con nuevos lazos en mayores vínculos con nuestro Dios y el poderoso Señor Jesucristo.
Si no se ponen de acuerdo -en esto tan simple- ¿cómo superarán los problemas fundamentales que no van superando en 10 y más años?"
La presente está dirigida a Uds. –hermanos y hermanas- a quienes el Señor Jesucristo ha tenido a bien encomendarles parte de Sus rebaños.
Nuestro Padre celestial, quién está en lo más alto, nos dio el servicio ejemplar y vicario, para que todos los que creemos en Él lo siguiéramos e imitásemos. Nuestro Padre no envió a varios de sus hijos “únicos” a morir en distintas y variadas cruces, sino única y exclusivamente al Señor Jesucristo; no obstante, por décadas cada denominación inventa el acomodo de su religión, como si no nos debiésemos a un mismo Señor y un mismo Salvador, cuya sangre menospreciamos al subestimar a otros, tan semejantes en el humano pecado y esta necesidad de redención que tenemos todos, sin distingo de raza, posición social o cultural.
Católicos, Evangélicos, “Testigos” –judíos y no judíos- hemos creado abismos denominacionales, y la palabra que se predica en la reunión de los unos, es distinta a la que Dios nos enseña para seguirlo y honrarle, de la cual Uds tienen un mayor y amplio conocimiento.
Este preámbulo es para decirles que es tiempo de unirse, como hermanos e hijos adoptivos del mismo Padre Celestial. No es un movimiento eucuménico, sino una necesidad que se hace cuando Cristo mismo nos exhortó a amarnos ¡mucho más que una simple palabra!.
En esta país, el enemigo ha colocado su trono. No me bastan estas líneas para explicar lo que Uds mismos ya saben y no es un secreto. Un siervo suyo se dedica a despotricar de la genocida (asesina) Israel, se involucra con naciones remotas que desean destruirla y esa clase de discordia es parte de las profecías apocalípticas y, la mejor prueba es un país dividido, familias fragmentadas por constantes cruces de opiniones, mismas que irrespetan hijos y parejas, empleando peyorativos de distinta naturaleza y –peor aún- discriminaciones que enlutecen hogares por simple y radical opinión política o avaricia económica..
Hombres y mujeres irrespetando sus parejas “escuálidas”. El irrespeto y la desidia ha colocado armas de fuego en personas indebidas, cuyas manos matan unos y otros, aprovechando la maldad sacar sus galas de envidia, egoísmo, en esta falsa sensación de seguridad y “PAZ” que la boca proclama, y las muertes diariamente contradicen.
El Padre Celestial quiere UNA ORACIÓN EN CADENA. Él desea que afinemos una misma Palabra en los oídos de Sus rebaños. Que el tal día de oración por Venezuela, no se realice dentro de un templo o lugar encerrado alguno, sino en sitio público y visible.
La calle, para ese día que Uds acuerden y organicen, ha de ser el sitio de acceso para que todo el que pase escuche y se aperciba: “El que tenga oídos que escuche” (Mateo 10:26-31).
Ese día, el que han de disponer en consenso –mismo día y misma hora- será para que se consagren en una vigilia, una oración en cadena, donde sacerdotes, pastores y todo el que tenga un llamado a liderizar un rebaño, investigue y ore a Dios para cada cita o estudio que ha de leer o tratar en esa reunión pública. Esa Palabra ha de exhortar a la unión e invocar al respeto familiar. Somos una diversidad, pero un solo cuerpo UNIDOS en Jesucristo. Se ha de enfatizar la supremacía de Dios por sobre todo principado y humano y, al mismo tiempo, aclarar que fuimos comprados por el incalculable sacrificio de la sangre de Cristo, la cual fue derramada para salvación de los que somos adoptados como hijos, la cual nos hace libres para servirle y hermanos para honrarle.
Siendo este el núcleo del mensaje, les exhorto a que lo comuniquen al rebaño que Dios les ha prestado. Háganles llegar el mensaje y que compartan esta visión, donde hemos de hacer a un lado la religión y denominación: El Señor les ha dado la sabiduría y muy bien sabe que podrán unirse en este propósito, mismo que exalta Su nombre y procura clamar por la nación que muchas cosas ha perdido.
Dios les permita participar y ejecutar este objetivo, y que este mensaje alcance a todo pastor, sacerdote o a quien desee figurar como líder, en un país que necesita una cadena de oración, un fraternal abrazo con nuevos lazos en mayores vínculos con nuestro Dios y el poderoso Señor Jesucristo.
Si no se ponen de acuerdo -en esto tan simple- ¿cómo superarán los problemas fundamentales que no van superando en 10 y más años?"
Subscribe to:
Posts (Atom)